miércoles, 19 de abril de 2017

Chipre y Grecia peregrinos agustinos 2017. En Salamina y Famagusta.- Chipre día 4

Una nueva y radiante jornada comienza con el amanecer de este jueves. Anoche tuve que pedir otro adaptador de enchufe en la recepcion del hotel, la cámara  se quedo sin batería y entre móviles y cámaras con uno no  da abasto.  A pesar de lo que nos dijeron, los enchufes son de tres clavijas cuadradas.
 Puntuales como un reloj, bajamos a desayunar y volando al bus sin olvidar pasaportes o DNIs. Los necesitamos para cruzar al otro lado, vamos a la zona turca. Conoceremos Salamina, el puerto donde San Pablo  desembarcó en Chipre y Famagusta la de las imbatibles murallas.
Estoy llena de energía, el día de sol y aire limpio de montaña que tuvimos ayer me han llenado las pilas. Aun hay nieve en lo mas alto de la cordillera de los Troodos, por lo visto hasta una pista para esquiar hay en los montes. Esta comprobado que este es un país de grandes contrastes. Me quedo frita en el autobús y no me entero de lo que va contando Anibal hasta que llegamos al check point. Porque aquí no hay frontera, hay punto de chequeo, sin embargo tardan mas que los rusos.  El guía se queda con los pasaportes, los mete en una bolsa amarilla y no nos lo devuelve hasta la vuelta. Atravesamos la base británica de Dekhelia. Hay otra más, cerca de Paphos. Los ingleses cuando dejaron la colonia se aseguraron un buen pedazo de tierra, como no. La república turca del Norte de Chipre no existe, para nadie excepto para los turcos, pero si podemos visitarla con las pertinentes precauciones ya que no tenemos cobertura de embajada ni seguro que no se haya contratado allí.  El territorio que cruzamos es árido, ha debido llover poco o nada este invierno. Dicen que Chipre tiene 300 días de sol al año. 
En la lejanía aparece un pueblo totalmente abandonado. Hay varios, Varosha, Mara...solo los soldados turcos entran aquí.

 Se nota que estamos en otro país, lo primero por las banderas, si antes eran la de Chipre y la griega, ahora son la turca y la turcochipriota que es la misma pero con los colores invertidos, y de dos en dos, por todas partes. 

También por las carreteras solitarias, aunque el trafico es mas caótico en las ciudades del Norte y los coches tienen como 20 años mas que en el Sur.  Tras un buen rato de bús, llegamos a un inmenso descampado a la orilla del mar, con dunas de arena rubia y algún eucalipto que da sombra al merendero cercano. Son las ruinas de primera división de Salamina, la antigua ciudad-estado griega. En tiempos bíblicos era la city mas importante de Chipre, mucho mas que su capital administrativa Paphos, debido a su puerto, punto estratégico de rutas entre Oriente y Europa. Aquí arribó San Pablo y comenzó su apostolado, llegó acompañado de Bernabé que era natural de la zona y continuaron viaje a la capital derramando la palabra de Dios por toda la isla.
 La ciudad quedó destruida tras sufrir terremotos varios además de las revueltas judías. En el siglo IV un emperador cristiano,Constancio II, la reconstruyó y la llamó Constanza, en su honor, pero luego llegaron los árabes y lo que no consiguieron destruir  los terremotos lo hicieron ellos. La ciudad fue abandonada y sus muros y columnas sirvieron para construir Famagusta.
 Un pequeño cartel nos indica por donde entrar: "giris entrance"

Nada mas poner un pie en las excavaciones vemos las estatuas blancas de mármol níveo decapitadas, según dicen, por los cristianos. Rodean una de las piscinas pertenecientes al gimnasio. 

 

Comenzamos  a caminar entre los restos de la que fuera exuberante Salamina, restos que corresponden en su mayoría a la época del emperador romano Augusto. El gimnasio, piscinas, baños, termas, teatro para 15.000 personas, anfiteatro, calzadas, acueductos,....
teatro de Salamina
En el gimnasio se preocupaban del entrenamiento de cuerpo y mente, mas parecido a un club social-escuela que lo que hoy conocemos por gym, la zona de las columnas correspondería a la palestra, lugar donde se realizaban los ejercicios al aire libre. En una esquina del complejo están las letrinas para 44 personas, el sentido del decoro debía ser muy distinto del de hoy día. ....todo esto con vistas al mar y a la playa, dicen, la mejor de todo Chipre. Salamina tuvo que ser una gran ciudad al  contar con semejantes instalaciones.



el gimnasio

El padre Bonifacio nos explica con detalle como funcionaban y se conseguía la temperatura adecuada en las termas. Es un lujo contar con semejante compañero de viaje.
restos de mosaicos en la cúpula

  La auténtica pena es que desde que este territorio cayera en manos turcas en 1974 se paralizaran las subvenciones para seguir excavando, aunque parece ser que a pesar de los acuerdos internacionales, el gobierno de la república Norte sigue excavando y descubriendo cosas. Veremos como acaba esto. Tras esta impresionante visita que me ha entusiasmado, una pequeña parada técnica en el merendero del lugar y continuamos ruta.

 

 Por la carretera, Aníbal nos muestra algunos túmulos que son tumbas. En las afueras de la antigua Salamina existe una enorme necrópolis con enterramientos de gente importante, la costumbre era sepultar al muerto con sus enseres incluido carro fúnebre y caballos o burros de tiro. Las que se hallaron con mayor ajuar las denominaron tumbas reales.
Nos dirigimos al  monasterio de San Bernabé patrón de Chipre,  a pocos pasos se encuentra la tumba del apóstol.


Tumba de San Bernabé

"San Bernabé nació en Salamina, hijo de una familia judía del clan de los levíticos, que emigró de Siria a Chipre. Cuando estaba llevando a cabo sus estudios de religión en Jerusalén fue testigo de algunos de los milagros de Jesús y se convirtió, entregando su herencia a la entonces humilde iglesia cristiana de Jerusalén. Fue nombrado arzobispo de Salamina y regresó a Chipre en el año 45, junto con Juan Marcos y el Apóstol San Pablo para evangelizar a la comunidad judía de la isla, no con mucho éxito aunque sí que consiguieron la conversión de Sergio Paulo de modo que Chipre se convirtió en el primer estado de la historia con un gobernante cristiano. En su segunda visita a Chipre, en el año 75, Bernabé fue arrestado por los judíos y apresado en una sinagoga de Salamina. Fue entonces cuando fue lapidado hasta morir. Envolvieron sus restos y los arrojaron a una laguna para que terminasen en el mar. Juan Marcos y algunos esclavos convertidos recuperaron sus restos y secretamente los enterraron bajo un algarrobo en cierto lugar al oeste de Salamina colocándole una copia del Evangelio de San Mateo sobre su pecho. Tras esto escaparon rápidamente a Egipto para evitar la persecución de los judíos.
El cristianismo estaba perseguido y la tumba cayó en el olvido. En el siglo V el Cristianismo regresó. La iglesia de Antioquía, fundada por Pedro, era la dominante. El Arzobispo Antemios de Chipre en el año 477 soñó que encontraba la tumba de Bernabé en un punto específico, bajo un árbol. Guiados por esta "inspiración divina" fueron allá y encontraron sus restos con el evangelio en el pecho. Ese evangelio fue regalado al Arzobispo de Constantinopla, quien encantado, otorgó autonomía a la iglesia de Chipre. Así pues los rangos eclesiásticos chipriotas eligen a su propio arzobispo, quien puede llevar en las ceremonias el mismo atuendo que el emperador de Constantinopla, el púrpura imperial y el cetro."


monasterio de San Bernabé

Cuando ocurrió la invasión turca, los ortodoxos evitaron la conversión de este monasterio en mezquita transformándolo  en museo. De este modo se conserva el monasterio, una iglesia, un museo arqueológico donde antes estaban las celdas de los frailes y el modesto mausoleo donde se encuentra la tumba del santo. Bajamos para presentar nuestros respetos y rezar todos juntos un Padre Nuestro.

Luego vamos a conocer el monasterio y en la puerta nos encontramos con un pope vestido de gris que baja de un buen coche, debe ser alguien importante. Habla con Aníbal para preguntarle de donde venimos y saluda a nuestros curas muy cordialmente.

Dicen que si hay gatos de Chipre, pero aquí veo mucho perro suelto, parecen  no tener un dueño sino pertenecer a un lugar. No están sucios sino alimentados y cuidados. Son tranquilos, dormitan al sol, como el país. La serenidad, la quietud, ese ambiente apacible que envuelve este Norte que estamos conociendo nos invade y serena nuestros ánimos. Entramos en el monasterio que es bien bonito fue construido en el s.V y reconstruido en el XVIII, hay bastante peregrino por aquí, lógico, es un lugar santo, sobre todo para los ortodoxos, ya que San Bernabé fue el fundador de la iglesia cristiana en Chipre, donde la  mayoría de la población es cristiano ortodoxa. 


En el interior, paredes encaladas en blanco cubiertas por algunos iconos que probablemente tengan bastante valor aunque no soy capaz de apreciarlo, una serie de ellos que explican como se encontró la tumba del santo. Me gusta mas el patio exterior con sus arboles y plantas. Hay otras salas dedicadas a cerámicas joyas y figurillas halladas en excavaciones arqueológicas cercanas. 


Nos vamos a conocer Famagusta, la ciudad metida en la arena, la que describieran como una de las urbes mas ricas y hermosas del mundo, la de las colosales murallas construidas por los franceses y reforzadas por los venecianos que la convirtieron en una de las mejores fortalezas de la cristiandad.
murallas de Famagusta

El corazón de la ciudad está dentro de sus murallas de nueve metros de ancho. Dentro, desde iglesias de todas las religiones a mezquitas, tabernas, bares, cafés, comercios de turistas, tiendas y tenderetes y hasta el castillo que inspirara a Shakespeare para su Otelo porque según dice la leyenda, allí vivía el gobernador de Chipre Cristophoro Moro que mató a su señora esposa por celos.
Nada hay mejor que ser un enclave geográfico para que te pasen por encima a lo largo de los siglos un buen puñado de culturas y dejen su impronta. Esto sufrió Famagusta que fué etapa clave en el camino hacia las cruzadas, pasó de mano en mano, cruzados, franceses, genoveses, venecianos, otomanos... de ahí su cosmopolitismo  cultural y sus monumentos. Nada mas hay que llegar a la plaza central y quedarse boquiabierto admirando una réplica de la catedral de Reims con un minarete anexo a su torre Norte. Es la actual mezquita de Lala Mustafá Pasha, el conquistador de la ciudad, antigua catedral de San Nicolás que perdió sus torres en el asedio de la ciudad.  Gracias a Dios, los otomanos cuando arrasaron Famagusta y despellejaron vivo al pobre capitán Bragadino que la defendió con gran valentía, decidieron mantener en pie esta preciosidad de la arquitectura gótica, igual que ocurrió con la cercana iglesia de San Pedro y San Pablo.
iglesia de San Pedro y San Pablo
Claro que cuando echas un vistazo dentro, las paredes desnudas, la falta de imágenes y del púlpito, te recuerdan que aquí ahora se reza desde el suelo a Alá. Luego pienso en la Alhambra y se me pasa el mosqueo.  Delante de la catedral, un anciano y frondoso sicomoro da sombra a unos señores que descansan en un banco. Dice Aníbal que el árbol tiene la misma edad que el edificio, es decir, mas de setecientos años, hummmmm....pero eso dice el cartel que está colgado en el. Algunos de los peregrinos ya hemos visto dos de estos: uno aquí y otro en Jericó.
Catedral de San Nicolás

Al otro lado de la plaza, un magnífico triple arco marca el lugar donde se situaba el palacio veneciano.  Y pregunta nuestro guía:
- ¿de donde vienen las columnas que sustentan estos arcos?.- Pues de Salamina. 
Famagusta esta construida con las piedras de la antigua Salamis. Aquí se mudaron los habitantes después de tanto terremoto y despropósito en la antigua ciudad.
Nos dice Anibal que hay contadas 365 iglesias dentro de las murallas que corramos a verlas. Esto se puede convertir en un estupendo ejercicio de búsqueda del tesoro durante las próximas dos horas.
Vamos a pasear a ritmo de maratón, buscamos las iglesias gemelas, una es de los templarios y la otra de los hospitalarios. ¿Cómo diferenciarlas? el padre Boni contesta: 
-"los Templarios eran mas soldados y los Hospitalarios mas monjes. Mirad la arquitectura.Una de las iglesias es mas cuartel y la otra mas monasterio, ahí tienes la respuesta".  
 Me encanta lo fácil que hace entender la historia este gran profesor.

iglesias gemelas
Incluimos las calles comerciales en nuestro intinerario, esto es igual a Castillejos, venden bolsos de imitación, camisetas de imitación, pañoletas de imitación.... un pedazo del Gran Bazar turco.
Reunificamos grupo tras semejante gynkana en un cafetín con vistas a las murallas y al castillo de Otelo, el Petek, muy concurrido a esta hora del día. Más de uno se premia con una cerveza talla "muy grande".  Yo bajo a ver la pastelería que me ha parecido oler cuando subía al salón con balcones. Es el sueño de cualquier goloso y desde luego, la pesadilla de un diabético. Un local con cierto aire retro, muebles de épocas olvidadas impolutos y suelos de  baldosas de mármol hecho pedazos. Hay de todo en todos los colores, pasteles de bizcocho y nata, merengues, chocolates, tartas artesanales, bombones, golosinas, hasta pastas morunas en sus mostradores.
pastelería Petek Pastanesi

una pequeña cervecita

No puede ser mas bonita esta ciudad, volvería mil veces.  El sol, la playa, las murallas, las ruinas de cientos de lugares que alguna vez fueron santos, los cafetines, los turistas, el aire que se respira... es una delicia.
Momento de  regresar a Lárnaca, comeremos allí pero antes vamos a misa a una iglesia católica  y aun debemos pasar el dichoso check point.  Nos esperan en la iglesia de Tierra Santa,  dedicada a la Virgen María, también se la conoce como iglesia de Nuestra Señora de Gracia. Atiende a la comunidad latina católica en Lárnaca. Preside nuestro Labrador mayor, el padre Esteban. Vamos a celebrar la Eucaristía en la capilla del asilo anexo. Ofrece la Eucaristía por el profesor de música de María Jesús y la tía de María José,  ambos fallecidos en estos últimos días. 
No hemos podido utilizar el templo principal porque en un rato celebran una boda, al salir coincidimos con los novios que entran, les ofrecemos una gran ovación, por su ilusión y felicidad futura. Son polacos que han venido a casarse. Hay muchas bodas en Chipre. De hecho existen agencias de viaje que te apañan matrimonio, banquete y luna de miel.

Hora de comer, desde que desayunamos a las 7 menos cuarto, no he querido tomar nada y estoy famélica.Vamos a un chiringuito- restaurante playero en Finikoudes, Monte Carlo, de esos que hay a miles en las costas españolas. Chipre nos gana en bares por habitante. Yo creía que este récord era nuestro pero curiosamente no lo es. Comemos pescado, pequeñas bandejas con frituras varias, ensaladas y cremas para acabar con una "perezosa" al carbón.  Muy rico todo. 


Nada más terminar con el café visitaremos San Lázaro,  la iglesia ortodoxa donde esta enterrado el amigo de Jesús,  el que resucitó y tuvo que salir huyendo de su casa en Betania porque se lo querían cargar por mentiroso. Otra vez más de lo mismo. Acabó en la isla de obispo de Lárnaca y cuando murió le hicieron un bonito templo donde se guardan sus restos. Cuentan diversas leyendas que no debía de tener muy buen carácter, una de ellas le atribuye el origen del Lago Salado. Lo convirtió en agua salada porque una señora, dueña de un enorme viñedo que ocupaba el lugar, no le quiso dar un racimo de uvas para quitarse la sed. Ahora suele ser estación de paso para aves migratorias.


El templo actual es del s IX, parece ser que es la tercera estructura levantada en el lugar. La mandó construir el emperador de Constantinopla  León VI en el mismo enclave donde habían aparecido los restos del santo, claro que él se llevó el cuerpo a la capital del imperio. 
Durante la ocupación otomana fue convertido en mezquita, los muslim echaron la torre campanario abajo para darse el gusto. A los pocos años  vendieron a los cristianos ortodoxos el templo por 30.000 monedas de plata, digo yo que algún susto se pegarían porque si no....Con el tiempo, la torre volvió a ser reconstruida a la moda, en románico, nada que ver con el pórtico gótico.
iconostasio de Agios Lazaros


En el interior muchas lamparas de cristal bien grandes y un bonito iconostasio barroco datado en el s. XVIII, que estuvo a punto de ser achicharrado en 1970 por un incendio en la iglesia.  En la restauración posterior se encontró en el altar un sarcófago con un cráneo y restos humanos incompletos  que se atribuyen al santo. Parece que no fue todo su cuerpo enviado a Constantinopla.  De los frescos de las paredes no  queda ni rastro, aunque sabemos que existían.


Tras esta visita, tarde libre, por fin. Vamos a explorar los comercios del pueblo. Me encuentro al padre Emilio que anda buscando un icono de la Natividad para su colección y acaba comprando uno de la resurrección de Lázaro , o eso cree él, porque cuando me lo enseña, yo lo que veo es a la mula y el buey en un portal de belén muy ambientado.
Seguimos paseando, entrando y saliendo de mil y un locales donde compro algunos imanes para la nevera y poco más.  Vemos un taller de un artesano del cobre que vende platos, cazos, pucheros....callejeamos sin rumbo fijo, nos tomamos un gin con tonic water y un heladito en una plazoleta escondida de la calle Ermou que empieza a encender luces y llenarse de gente.
El objetivo es llegar al hotel para ducharse y levantar piernas unos minutos antes de la cena. Algunos deciden salir a cenar fuera del hotel, el restaurante elegido esta junto al de esta mañana, Militzis,  viene recomendado en la guía que lleva Jacobo, el lugar pinta bien y el cordero resulta exquisito según me cuentan. Nosotros nos quedamos porque andamos un poco perjudicados aunque si salimos a tomar una copa nocturna que al final, dura hasta bajas horas de la madrugada, en el mismo lugar de la tarde.
 Mañana es la última maratoniana jornada en la isla y hay que aprovecharla bien. Este viaje está resultando muy intenso, o será que tengo mas años y menos fuelle. Espero que aun me queden muchos mas para poder disfrutar de estos sitios y sobre todo de esta maravillosa gente.


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