domingo, 23 de abril de 2017

Chipre y Grecia peregrinos agustinos 2017. El de los limones amargos.- Chipre día 5

Hoy jueves 20, tarde de abril y Levante, como reza la canción.  He  pedido asilo político a mis progenitores, en vista de que han echado el cerrojo en el puerto de Algeciras y lo que te rondaré morena. Un ordenata mas antiguo que el hilo negro pero que todavía arranca, me presta apoyo moral para conectarme al mundo exterior. Gracias al todo poderoso  Sr.Gloogle + puedo anotar en el blog lo que pasa por mi inquieta cabecita y ver las fotos que vais enviando y subiendo a la nube.
 Aprovecho para seguir dando fe de los días pasados en Chipre, días de sol, de mar y vistas preciosas, paz y serenidad en compañía de amigos de siempre, disfrutando de conversaciones, risas, experiencias, lugares.... Es, de verdad, un auténtico regalo que la vida nos hace cada año.
Cuentan los que saben que tus amigos de siempre son aquellos con los que te has relacionado en los  últimos 7 años. Pues eso, no sé si es así de exacto, los de este grupo llevamos "interaccionando " mas de 7.
El viernes 7 de abril, último dia en tierras chipriotas,  transcurrió de un modo un tanto especial. Volvimos al Norte, al país que no existe, como Nunca Jamás ,en nuestro incomodo autobús a Morphou, Kyrenia y Bellapais. 
El día guarda sorpresas, algunas anunciadas y otras...  bueno, otras totalmente divertidas y hasta un poco improvisadas, ya llegaremos a ellas.
Para empezar, es el cumple del mejor, nuestro vicario choquero hace 57, aunque no los aparente. Nos gusta celebrárselo, ya lo creo. Hoy dejaremos caer todo nuestro arsenal sobre el. Eso será luego, cuando volvamos. Ahora nos vamos hacia la bahía de Morphou, allí se encuentra la iglesia de San Mamés,  el que cura los oídos.

Llegando a la linea verde empezamos a ver edificios con carteleras de neón de nombres más que sugerentes...night club, blue moon, lipstick. .. cientos y un lupanar se amontonan en las afueras de Nicosia. Llegamos al check point. Otra vez pasaportes abiertos por la hoja de la foto y un policía turquis que sube hasta tres veces al bus a contarnos. Lo llevan en el ADN.
  Ayer, igual que hoy, la república turca del Norte de Chipre  obliga a contratar a un guía local "mudo" que nos debe acompañar durante toda la visita. El que nos toca en esta ocasión es un chico joven que  habla inglés  además de la jerga local y que debe que viajar en su propio mercedes. Deben ganarlo bien.

iglesia de San Mamés Morphou.

En principio, San Mamés el de los leones, es un santo de la Capadocia. Cuentan que quedó huérfano a muy temprana edad y le crió una viuda rica cristiana, de quien adoptó el nombre. Cuando tenia 15 primaveras su tutora murió  y tuvo que refugiarse en el bosque donde le predicó a las fieras. Poco después le apresaron por aquello de ser cristiano y lo echaron a los leones que pasaron de él. Los soldaditos del gobernador lo trincharon como un pavo con un tridente, y de esta  ya no salió.  Anibal nos cuenta otra historia distinta, aunque  enmarañada con esta. Parece ser que en Morphou en el s. XII había un ermitaño que residía en una cueva manteniéndose del cultivo de uvas y poco más. El hombre se negó a pagar impuestos, con lo que se ganó el pase a mazmorras, lo apresaron y de camino a la ciudad la comitiva se cruzó con un león a punto de merendarse un tierno corderito. Mamés cogió al cordero en brazos y se montó a lomos del león, de esta guisa llegó a la ciudad. A partir de aquí a ver quien le chistaba, ya nunca mas le reclamaron pago de impuestos.


Sea el santo que sea, la iglesia en su honor se levantó sobre un templo dedicado a la diosa Afrodita ( hay uno en cada esquina) y fue  reconstruida en el periodo Lusignac.
Llegamos al monasterio que se encuentra en la bahía de Morphou. Hay algunos autobuses todos visitando el lugar. Además de la iglesia, muy cerca se encuentra el museo arqueológico y de la naturaleza de Morphou o Guzelyurt, manía que tienen estos de nombrar las ciudades por lo menos con tres nombres: el antiguo, el greco-chipriota y el turco. 

sarcófago de San Mamés.

 Entrando en la iglesia la la izquierda nos encontramos con el sarcófago del santo, empotrado en un muro exterior. La losa de mármol blanco parece rezumar una especie de aceite, cuentan, milagroso contra el mal de oídos, los ojos y el "mal de mer".
Las paredes están cubiertas de cuadros con iconos, hay una virgen que me llama la atención por la posición de las manos:

También hay un trono bien bonito con un artesonado muy trabajado y colorido.
Nos entretenemos un rato en el patio posando para fotos. Allí un señor vende zumos recién exprimidos de naranja y granadas junto a frutos secos, higos, ciruelas, pasas.. ¡Ummm que rico!

museo arqueológico de Morphou
En el museo encontramos desde estatuillas de la venus artemisa a utensilios de cerámica,  joyas, o animales disecados. En cualquier rincón de la isla cada vez que das una patada al suelo saltan restos de treinta siglos atrás. 



Es hora de continuar viaje desplazándonos hacia la costa para visitar uno de los puertos más famosos del  Mediterráneo, Kyrenia. Es probablemente la ciudad con mas turismo de todo Chipre. Cuenta con numerosos  hoteles, algunos de 5 estrellas, varios centros comerciales, restaurantes, cafeterías, pubs, tiendas.... Los turcos la llaman Girne. Si te quieres comprar un rolex por 30 euros es el momento.



Nuestro guía nos informa que no podemos gastar más de 260 euros por barba y solo nos dejarán pasar 40 cigarrillos. Me sobran 240 euros y 40 pitillos. 

Girne cuenta con un gran puerto comercial que enlaza la isla con el continente, sobre todo con Turquía que está a unos 100km y otro puerto deportivo donde se sitúa el Girne Kalesi (castillo de Girne  en turco) .


puerto deportivo de Kyrenia

Dejamos el bus en un parking situado junto a un cementerio otomano, tenemos lío l entrar,  un espabilado ha dejado su furgona bloqueando parcialmente el acceso y casi hay que liarse a mandobles para que la retire. (Es un decir, estos chavales son muy pacíficos).
Llegamos a la plazoleta central del pueblo adornada con banderines y una bonita fuente con tres enormes palomas, mucha gente cruza en todas direcciones, incluso vemos una excursión de pequeños escolares uniformados, colocados en fila esperando las instrucciones de su profesora.
Anibal nos muestra sobre el terreno las calles comerciales, la situación del puerto y del castillo y quedamos en vernos un rato  después en el parking donde por fin aparcó el bus.
Como el tema shopping no me motiva mucho y menos las imitaciones, nos vamos de gymkana con google maps a mano para visitar el puerto y el castillo. Bajamos por una de las muchas calles donde se acumulan tiendas que venden de todo, relojes, camisetas, cazadoras de cuero, bolsos o perfumes de imitación. Hacia la derecha está el paseo marítimo a tope de grandes hoteles que conduce hacia el puerto antiguo.
puerto de Kyrenia
Es realmente bonito, pequeño, con forma de herradura, calles adoquinadas y edificios venecianos medievales que aprovechan sus antiguas bodegas y almacenes de algarrobas ,que se exportaban a todo mundo conocido, como coquetos restaurantes de sol y sombra, mientras las embarcaciones atracadas en los pantanales se mecen al ritmo de las olas que entran en la bahía. Desde yates a pequeñas chalupas de pesca se alinean delante de un anciano muelle rompeolas prolongado hacia el castillo y acabado en un cansado faro antediluviano, en realidad es una torre desde donde se cerraba la entrada al puerto.

castillo de Kyrenia
 Hace un día primaveral, el sol ha salido de paseo con su amiga la brisa marina para ponernos de buen humor y que podamos disfrutar de este encantador recorrido por un lugar centenario. 
El castillo se levanta al final del paseo desde donde contemplamos una vista impresionante de la ciudad con la cordillera Pentadaktilos al fondo.

  Rodeamos los colosales muros del Kalesi, tirando fotos a diestro y siniestro. Los venecianos reforzaron la estructura tetragonal dotándola de bastiones a prueba de cañones. El camino que ocupa ahora el lugar del antiguo foso, va ascendiendo hacia la iglesia de San Andrés.

 Llegamos a una bifurcación, hacia arriba la plaza donde comenzamos nuestro recorrido, hacia abajo un puente soportado por dos arcos que  salvan el antiguo foso.
 Algunos entran en el museo del castillo para ver los restos de un pecio del siglo III a de C. Ademas de la iglesia de San Jorge que antiguamente se encontraba extramuros pero desde que los venecianos reforzaron las murallas, quedó dentro.

Acabamos nuestra visita a Kyrenia en una cafetería donde encuentro a parte de la excursión disfrutando de una refrescante cerveza mientras la otra parte apura compras en un bazar cercano donde venden cojines de alegres colores, bordados, mantelerías y batiburrillo para turists. Sigo sin encontrar mis láminas.
cervecita del midi.
 Tras el kit kat,  vuelta a la ruta para subir a Bellapaís, villa localizada a unos kilómetros de Kyrenia, en dirección a las montañas que recibe su nombre de la bellísima abadía de la Paz. El escritor inglés Lawrence Durrell llegó un día  a estos parajes y se quedó a vivir tres años, lo cuenta en su libro Limones amargos de Chipre.

 "Acabando el siglo XII, los frailes custodios del Santo Sepulcro de Jerusalén retornados contra su voluntad hacia Poniente huyendo del gran Saladino, arribaron a estos lares estableciéndose en ellos, a la expectativa de lo que ocurriera en la perdida Tierra Santa. Construyeron aquí una iglesia dedicada a Santa María de la Montaña. En poco tiempo, fueron sustituidos por "Los caballeros de la Cándida y Canóniga Orden Premonstratense" que seguían  las reglas de San Agustín, desde entonces se conoció el lugar como "la abadía blanca, por el color de los hábitos norbertinos. 
Ya en el s.XIII un caballero, Roger el Normando, regala a la abadía un trozo de la Santa Cruz lo que convirtió el lugar en una zona muy solicitada de peregrinación y enriqueció sus arcas.  De este modo comenzó a finalws de este siglo, la construcción de esta maravillosa abadía al mas puro estilo gótico francés, durante el reinado el rey Lusignac Hugo III. Fue también este monarca el que otorgó al Abad el derecho de utilizar mitra, espada y espuelas de oro. 
Posteriormente, durante la primera mitad del s. XIV se levantaron el actual claustro y el refectorio.  
En el interior de la iglesia se cree están enterrados algunos reyes Lusignac.
Toda esta riqueza fue una tentación demasiado grande para los genoveses que robaron las  reliquias y los bienes cayendo entonces la abadía en una espiral de deterioro moral y físico. A finales del s. XVI aquello era prácticamente una ruina. Cuando llegaron los otomanos echaron a los monjes y le entregaron el complejo a la iglesia ortodoxa griega. Una aldea creció junto al monasterio cuyos habitantes dicen ser descendientes de aquellos monjes."


 Una joya de la arquitectura religiosa que Chipre se tiene bien guardada. No me esperaba que al volver la curva, la carretera nos mostrara la belleza de esas ruinas asentadas sobre el acantilado cuajadito de cipreses y pinos. No me esperaba  que me gustara tanto. No me esperaba conocer hoy el lugar mas romántico del mundo.

Dicen que delante de la abadía se encuentra el árbol de la ociosidad, bajo el que se refugian los lugareños para descansar, beber y jugar a las cartas. Los habitantes del pueblo tienen fama de ser los mas holgazanes de toda la isla, claro,viven en el paraíso, no necesitan moverse para nada.
espero que no sea este el árbol de la ociosidad.

 Hacemos el último tramo de la ruta a pie, la calzada es muy estrecha. Pasamos frente a casitas campestres con jardines ya florecidos y vistas al mar de Kyrenia. En una pequeña mezquita cercana rezan, se nota que prácticamente el 100% de la población es musulmana.
Llegamos a los pies de la abadía y lo que veo me maravilla. La única torre campanario que queda en pie con las dos banderas de rigor dan la bienvenida. Detrás, se dejan ver los arcos del claustro, los antiguos muros que llevan al refectorio o a la biblioteca, o la galería por donde se sube al piso superior.
interior de la iglesia


Un árbol cargado de radiantes flores de azahar permite el paso a la iglesia, de interior negro como el carbón,  probablemente de tanta vela ortodoxa. Es la única parte de todo el monasterio que siempre ha estado en uso. Está dedicada a la Virgen Vestida de Blanco. No se que Virgen es. quizás lo de "vestida de blanco" le venga de los frailes norbertinos. 
El claustro es de una exquisitez majestuosa. Los 18 estilizados arcos góticos, en equilibrio infinito, rodean el jardín cuajado de arbustos de tomillo y romero, se asemejan al mejor decorado romántico que jamas haya podido imaginar. La elegancia de los cipreses cimbreantes junto a dos grandes sarcófagos romanos, los naranjos reventones a flores que perfuman el aire... Chipre huele a azahar, a tomillo y a romero.
claustro de La abadia Bellapais

 En la parte que da al Este se encuentra la zona de estudio y trabajo, probablemente la biblioteca. Queda poco de ella. Se señala un piso superior donde estarían los dormitorios. En el Oeste el refectorio, quizás lo mejor conservado de todo. Sobre el dintel de la puerta , tres escudos, el de los Lusignac, el de los reyes de Jerusalen y el de las familias reales de Chipre, dicen. Se trata de una gran sala con un púlpito  para dirigirse a los monjes mientras comían. Está iluminado por seis ventanas en la pared Norte mas un rosetón en la Oriental. Esta magnifica habitación se utiliza actualmente para conciertos.

restaurante Kybele

Comemos aquí. En el restaurante de la abadía. Se llama Kybele y está totalmente mimetizado con el entorno. Estoy sentada delante de una cristalera desde donde veo a mis pies todo Kyrenia, hasta el castillo en el viejo puerto, al fondo la cordillera Pentadaktylos, y a mis espaldas la fastuosa abadía.
 Esta visita junto a Famagusta  probablemente sean lo que mas me ha gustado de todo Chipre.
 Mientras los demás toman café, me escapo y vuelvo a visitar la abadía. la luz ha cambiado, el sol ha dejado paso a un cielo gris, ahora se la ve mas bonita aun si cabe. Entro al refectorio y subo al púlpito donde imagino la vida de este lugar unos siglos atrás.. la imaginación da para mucho en un lugar como este, pero, hay que seguir adelante. Regresamos a Lárnaca , el que cumple tiene que cumplir y regalarnos la Eucaristía de hoy que celebramos en la capilla del colegio católico de san José frente al hotel.
Es hora de despedirse de nuestro guía en este viaje Anibal David, esta madrugada no nos acompañará al aeropuerto. Ha sido un agradable compañero, atento, amable, risueño, servicial, aunque nada que ver con nuestra chica favorita, Silvia, que estuvo con nosotros en Rumanía.

 Y después de cenar, llegó lo bueno. hacia tiempo que veníamos planeándolo, "este año queremos un fin de fiesta memorable" y desde luego que lo ha sido. Que mejor excusa que un cumpleañero para montar la del pulpo y echarnos unas risas. Sin ensayos previos ni na de ná, con cuatro pelucas y mucha cara nos montamos un juego de "adivina quien canta que". En el mismo autobús de vuelta fuimos concretando detalles.  El día que se nos ocurrió la idea no me podía imaginar que llegara a ser tan divertida. Edu abriendo la gala al son del Bienvenidos con sus ensortijados cabellos negros, un Raphael mas mimético que nunca con su chaqueta al hombro, que nos hizo retorcernos de risa, los Rincón bailando al son del "viva España" con gentil gracia chulesca envueltos en un precioso mantón de Manila, Jacobo abducido por el espíritu del magistral Nino Bravo, el Mediterráneo de Serrat cantado por Pedro y coreado por todos, la apatía histriónica de Perales copiada al máximo exponente por Rafa, las chicas con sus coloreadas pelucas tratando de bailar al son de una Alaska multiclonada, ese Miguel Bosé....que decir de ese personaje de vergüenza torera que hizo llorar a todos de risa. Y para rematar la noche, las tres trillizas platinum con D. Julio rizos Iglesias. No recuerdo cuando fue la ultima vez que nos reímos tanto. Está claro que formamos un equipo excepcional. Con estos al fin del Mundo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario